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Chistes de leprosos

Otros chistes

Chiste de buenos, largos

Un hombre ciego entra en un "bar de chicas" por equivocación. Se las apaña para llegar hasta la barra y pide una copa, y tras estar un rato sentado en la tabureta le grita al camarero:

- Eh, tú, te gustaría oír un buen chiste de rubias?

Inmediatamente se hace un silencio total en el bar y con una grave, profunda y áspera voz, la mujer que esta sentada junto a el le dice:

- Antes de que cuente ese chiste, señor, y en atención a su minusvalía física que le impide ver, creo que lo justo es que le advierta de cinco cosillas: - Que la camarera es rubia. Que el portero del bar es una mujer rubia. Que yo mido un metro ochenta, peso 80 kilos, soy cinturón negro de kárate y tengo el pelo rubio. Que la mujer que esta conmigo es levantadora de pesas y es rubia; y que la dama que esta sentada al otro lado de usted es una luchadora profesional y también es rubia. Y ahora que sabe eso, piénselo cuidadosamente. ¿De verdad todavía quiere contar ese chiste?

El ciego piensa durante un par de segundos, menea la cabeza y contesta:
- Naaa... Pues no lo cuento....Paso de tener que explicarlo cinco veces!

Tags: rubias, mujeres

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Chiste de largos, buenos, profesiones

Un individuo se presenta en unos grandes almacenes para buscar trabajo de vendedor.
- ¿Es usted buen vendedor?
- De primera
- Tendré que hacerle previamente unas pruebas
- Lo que usted considere
- De momento lo pondré en la sección de ferretería.
Al tío lo pasan a la sección de ferretería. Al día siguiente todo vendido incluidos los mostradores y la caja registradora.
- Usted se ha pasado un poco ¿eh?
- Si es que cuando me pongo a vender me animo ¿sabe?
- Ahora lo pondré en la sección de sastrería, si me vende este traje queda usted admitido.
El traje tenía delito: La chaqueta era verde, con las mangas amarillas, el pantalón rojo con lunares negros. Al día siguiente el traje vendido.
- ¿Se lo habrá vendido a un familiar?
- No, a un cliente.
- A un cliente y ¿qué dijo el cliente?
- Nada, el cliente no dijo nada, eso si, su perro lazarillo me quería morder.

Tags: ciegos, tiendas, comerciales

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