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Chistes de papel

Otros chistes

Chiste de animales, largos, buenos

Un tipo va al África y, para no sentirse tan solo, decide llevar a su perro, un chihuahua mariquita. El primer día del safari, el animal, muy contento, se pone a corretear detrás de las mariposas y cuando menos se lo esperó ya se había separado del grupo.
El chihuahua, desesperado, empezó a buscarlos cuando, en eso, ve que una pantera muy enfurecida se dirigía hacia él dispuesta a comérselo.
Asustado, rápidamente piensa qué hacer; ve unos huesos que estaban junto a él y los empieza a morder con mucha ferocidad. Justo cuando la pantera lo iba a atacar, el perro exclama:
- ¡Mmmmmm, qué rica pantera me acabo de comer!
La pantera, al escuchar eso, se frena con estruendo y huye muy asustada mascullando:
- ¡Jodido perro, por poco me come a mí también!
Pero arriba de un árbol, estaba un mono cabrón que vio todo lo que había pasado. Éste se baja muy rápido y va tras la pantera para contarle todo lo que vio. Al escuchar aquello, la pantera, muy enojada, le ordena al mono:
- Súbete, vamos a buscar a ese maldito perro para ver quién se come a quién.
El perro mariquita se da cuenta que la pantera viene, con el simio trepado, dispuesta a todo. En un instante, el perro adivina que el mono fue con el chisme pero en lugar de correr, se da la vuelta como si no hubiera visto nada y se pone a leer un periódico. Cuando la pantera ya lo iba a atacar, el perro se queja:
-¡Puto mono de los cojones!!!, hace como media hora que lo mandé por otra pantera y todavía no regresa!

Tags: panteras, perros, monos

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Chiste de suegras, largos, buenos, verdes

- Doctor, ¡ya no aguanto más! A pesar de todos mis esfuerzos, mi marido no me considera. Desde que nos casamos, él sólo habla de su mamá, mamá, mamá..... 
¡es como si yo no existiese!
   El psicólogo le pregunta si ya probó con hacer una cena especial.
 - Sí, pero no ayudó nada.
 - Tengo una idea, señora  -dice el psicólogo.
 - Si hay un lugar donde su suegra no puede rivalizar con usted, es en la cama. Esta Noche usted se viste con un vaporoso negligé y camisón negro de encaje,
todo transparente. Además póngase medias de encaje, un mini tanga y liguero negro, el color negro es muy sexy y excitante, maquíllese, use altos tacones
de pulsera, negros obviamente, además cambie las sábanas; coloque sábanas de seda, con ese ambiente seguro que no resiste. Si puede coloque unas velas
en lugar de luz eléctrica.
   La despampanante joven siguió todo el plan al pie de la letra, sin olvidar ningún detalle. Sentía un leve rubor en todo su cuerpo al preparase para
su esposo.
   La verdad es que ella misma nunca se había sentido tan sexy, provocadora y voluptuosa, al mirarse de cuerpo completo en el espejo, sintió deseos por
ella misma, de tan sexy que se veía.
   Al llegar el marido adopta una postura provocativa; él entra a la habitación, la ve y gritando pregunta con cara de desesperación:
 - ¿Por qué estás toda de negro? ¿Le pasó algo a mi mamááá?

Tags: matrimonio, psicólogos

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Chiste de largos, buenos, infidelidad, matrimonios

Estaba una mujer con su amante y de repente oye que el marido abre la puerta.
- ¡Date prisa! - le dice al tipo - ¡Quédate de pie en la esquina!
Rápidamente le frota aceite de bebé por todo el cuerpo y luego le espolvorea con polvos de talco.
- No te muevas hasta que te lo diga, le susurra ella, simula que eres una estatua.
- ¿Qué es esto, querida? - le pregunta el marido al entrar.
- ¡Ah, sólo una estatua!, responde ella con naturalidad-, los Pérez compraron una para su dormitorio, me gustó tanto que compré una para nosotros también.
No se habló más sobre la estatua, ni siquiera por la noche cuando se metieron en la cama. A las dos de la madrugada, el marido se levanta, va a la cocina y vuelve con un sandwich y un vaso de leche.
- Toma, le dice a la 'estatua', come algo. Yo me estuve como un idiota durante tres días en el dormitorio de los Pérez y nadie me ofreció ni siquiera un vaso de agua.

Tags: estatuas, maridos

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Chiste de buenos, largos

Un transportista llevaba una partida de pingüinos hacia el zoológico, cuando a medio camino se le estropea el camión refrigerado. Preocupado, trata de reparar el problema pero ve pasar un camión repartidor de leche y consigue que se detenga.

Entonces le dice al lechero:
- Mira, te voy a dar 500 euros para que me hagas el favor de llevar estos pingüinos al zoológico.

El lechero acepta el dinero y se lleva con gusto los pingüinos en su camión refrigerado.
Mientras tanto, el transportista logra arreglar el daño, y de inmediato enfila hacia el zoológico.

En cuanto llega, ve salir al lechero, con los pingüinos detrás de él, en fila. El chófer le pregunta al lechero:

- ¿A donde vas con los pingüinos?
El lechero se lo queda mirando y le responde:

- Ya los llevé al zoológico, pero como me sobró dinero, ahora los pensaba llevar al cine..."

Tags: zoológicos, pingüinos, camioneros

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