XUso de cookies:Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar la experiencia de navegación y ofrecer contenidos y publicidad de interés. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Puede obtener más información, o bien conocer cómo cambiar la configuración, en nuestra Política de cookies

Buscador de chistes

Chistes de deseos

Chiste de buenos

Estaba un africano totalmente perdido en el desierto del Sahara, sin agua, sin comida, sin nada, totalente solo... en eso en uno de sus últimos pasos descubre una pequeña lámpara mágica. Sorprendido, la frota con gran ansiedad y fe de salvarse.
Se le aparece un genio que le dice:
- A ver, ya que me despertaste te voy a conceder tus tres deseos, pero dímelos todos juntos para ahorrar tiempo.
Entonces el africano se queda pensando unos segundos y dice:
- ¡Ya los tengo¡ Primero, quiero ser blanco, mi segundo deseo es ver muchos culos, sí, ver muchos culos, y por último... quiero quitarme la tremenda sed que tengo, así que quiero que nunca más me falte el agua.
Y entonces le dice el genio:
- ¡Deseos concedidos!

Y lo convierte en un WC.

Tags: genios, africanos, sahara, deseos

Comparte o comenta este chiste en Facebook, Twitter o Google+

Otros chistes

Chiste de malos, borrachos

Un borracho en un Bar. Al entrar le dice al camarero:
- Deme una botella para mí, una para usted, y otra para todos los que estén aquí.
El camarero se las pone, y al terminarlas le pide la cuenta, el borracho contesta:
- Vaya, hoy no traigo dinero.
Por lo que lo saca a golpes. Al día siguiente vuelve a ir y dice:
- Dame una botella para mí, una para usted, y otra para todos los que estén aquí.
El camarero se las da, y al terminar le cobra la cuenta y el borracho contesta:
- Se me olvidó traer el dinero.
Por lo que otra vez lo saca a patadas.
Al tercer día el borracho vuelve a la cantina y pide:
- Dame una botella para mí, y otra para todos los que estén aquí.
El camarero le pregunta:
- ¿Y a mí por qué no?
- Porqué usted cuando bebe se pone violento.

Tags: botellas, bares, camareros

Comparte o comenta este chiste en Facebook, Twitter o Google+

Chiste de buenos, largos

Un pasajero le toca el hombro al taxista para hacerle una pregunta. El taxista grita, pierde el control del coche, casi choca con un camión, se sube a la acera y se mete en un escaparate haciendo pedazos los vidrios.

Por un momento no se oye nada en el taxi, hasta que el taxista dice:

– Mire amigo, jamás haga eso otra vez! Casi me mata del susto!
El pasajero le pide disculpas y le dice:
– No pensé que se fuer a a asustar tanto si le tocaba el hombro
El taxista le dice:
– Lo que pasa es que es mi primer día de trabajo como taxista
– ¿Y qué hacía antes?
– Fui chófer de carroza funeraria durante 25 años

Tags: taxis, taxistas, coches

Comparte o comenta este chiste en Facebook, Twitter o Google+