XUso de cookies:Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar la experiencia de navegación y ofrecer contenidos y publicidad de interés. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Puede obtener más información, o bien conocer cómo cambiar la configuración, en nuestra Política de cookies

Buscador de chistes

Chistes de jubilados

Chiste de ancianos, largos, buenos

Un jubilado comenta:
La gente que todavía trabaja me pregunta a menudo que qué hago diariamente, ahora que estoy retirado...
Pues bien, por ejemplo, el otro día fui al centro y entré en Correos a recoger un paquete que me había llegado, sin tardar en la gestión ni cinco minutos.
Cuando salí y llegué al coche que estaba en la puerta, un Policía Local estaba rellenando una multa por estacionamiento prohibido.
Rápidamente me acerqué a él y le dije:
- ¡Vaya hombre, no he tardado ni cinco minutos...! Dios le recompensaría si hiciera un pequeño gesto para con los jubilados...
Me ignoró olímpicamente y continuó llenando la infracción.
La verdad es que me pasé un poco y le dije que no tenía vergüenza. Me miró fríamente y empezó a llenar otra infracción alegando que, además, el vehículo no traía yo no sé qué calcomanía de la ITV. Entonces levanté la voz para decirle que me había percatado de que estaba tratando con un capullo, y que cómo le habían dejado entrar en la Policía...
Él acabó con la segunda infracción, la colocó debajo del limpiaparabrisas, y empezó con una tercera.
No me achiqué y estuve así durante unos 20 minutos llamándole de todo.
Él, a cada insulto, respondía con una nueva infracción. Con cada infracción que llenaba, se le dibujaba una sonrisa que reflejaba la satisfacción de la venganza...
Después de la enésima infracción... le dije:
- Lo siento. Lo tengo que dejar, porque... ¡Ahí viene mi autobús!
Y es que desde mi jubilación, ensayo cada día cómo divertirme un poco. Es importante hacer algo a mi edad, para no aburrirme.

Tags: abuelos, jubilados, policías, multas

Comparte o comenta este chiste en Facebook, Twitter o Google+

Otros chistes

Chiste de Lepe, animales

Sale uno de lepe del pueblo caminando. Después de varios días llega a Salamanca muerto de hambre y se encuentra con un pastor y le dice si adivina cuantas ovejas tiene si le regala una, a lo que el pastor accede.
El lepero cuenta y le dice al pastor 2558 ovejas.
El pastor todo asombrado le deja llevarse una oveja.
Al rato el pastor le grita al lepero:
- Muchacho vuelve acá, si adivino de dónde eres me devuelves la oveja.
El lepero acepta y le dice el pastor:
- Usted es de Lepe.
- Anda, ha acertado ¿Y como lo sabe?
- Hombre de 2558 ovejas que tengo no vas tu y te llevas al perro...

Tags: pastores, ovejas, perros

Comparte o comenta este chiste en Facebook, Twitter o Google+