XUso de cookies:Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar la experiencia de navegación y ofrecer contenidos y publicidad de interés. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Puede obtener más información, o bien conocer cómo cambiar la configuración, en nuestra Política de cookies

Buscador de chistes

Chistes de sacerdotes

Chiste de religión, largos, buenos

Cierto día llega un joven a confesarse y le dice al sacerdote:
- Padre, confieso que le hice el amor a mi novia.
El padre le dice:
- Hijo, eres un pecador.
El joven se defiende diciendo:
- Padre, compréndame, es que ella sola, yo solo y la casa sola...
El padre dice:
- Bueno, hijo, te comprendo, pero igualmente eres un pecador.
- Pero padre eso no es todo, también le hice el amor a mi suegra.
- A tu suegra! eres un degenerado.
- Pero padre, comprenda, mi suegra sola, yo solo, la casa sola.
- Mmm.. dificil de comprender hijo, muy dificil.
- Pero padre, hay mucho más, es que también le hice el amor a la abuelita de mi novia.
- Queeé?? Esto es el colmo, - responde asustado el padre.
- Pero padre, compréndame, la abuela sola, yo solo y esa casa sola.
- Hijo, esto es imposible de comprender.
- Pero padre, falta más todavía. Le hice el amor a... a...
En ese momento sale el padre corriendo asustado y el joven le dice:
- Padre, por qué corre? ¡termine de escucharme!
- No hijo, ni sueñe, es que usted solo, yo solo y la iglesia sola!

Tags: buenisimos, sacerdotes, curas

Comparte o comenta este chiste en Facebook, Twitter o Google+

Otros chistes

Chiste de ancianos, buenos

Esto es un autobús repleto de viejecitos, que van de viaje a Lourdes.
Una viejecita le toca el hombro al chófer y le da un gran puñado de cacahuetes sin cáscara.
El chófer sorprendido le da las gracias y se los come con agrado.
Pocos minutos más tarde, la abuelita vuelve a venir, el chófer vuelve a agradecerle el gesto y se come los cacahuetes.
A los cinco minutos, la anciana viene de nuevo con otro puñado.
El chófer ya no puede comer más y le pregunta:
- Buena señora, es muy amable de su parte regalándome tantos cacahuetes, pero…… ¿usted no cree que, a lo mejor, sus cincuenta amigos y amigas les apetecerían también unos pocos?
- ¡ No se preocupe caballero!, no tenemos dientes para masticarlos y sólo chupamos el chocolate que los recubre!

Tags: chóferes, conductores, cacahuetes

Comparte o comenta este chiste en Facebook, Twitter o Google+

Chiste de buenos, largos

Un hombre entra en un banco y le dice a la cajera:
- Quiero abrir una puta cuenta.
- Por favor, señor, está prohibido hablar de esa manera aquí.
- ¿Por qué mierda prohíben eso?
- Señor, le suplico deje de decir palabrotas.
- Me importa un pito lo que piense usted, yo sólo quiero abrir una miserable cuenta en este puto banco.
Entonces la cajera se va y regresa con el director del banco.
El director sale, enfadado e increpa al hombre:
- Disculpe, caballero ¿le puedo ayudar en algo?
- ¡Hostias! Claro que sí. Acabo de ganar 35 millones de euros en la lotería y quiero abrir una puta cuenta en este banco de mierda.
- Ya veo - dice el director-, y esta estúpida perra cabrona le está molestando ¿verdad?

Tags: dinero, banqueros, bancos, lotería

Comparte o comenta este chiste en Facebook, Twitter o Google+

Chiste de matrimonios, amigos

Un hombre que siempre molestaba a su mujer, pasó un día por la casa de sus amigos para que lo acompañasen al aeropuerto a despedirse de su esposa que se iba a París.
Al despedirse, frente a todo el mundo, él le desea buen viaje y en tono burlón le grita:
- Amor, que tengas buen viaje y no te olvides de traerme una hermosa francesita Ja ja ja!!
Ella bajó la cabeza y se embarcó muy molesta.
La mujer pasó dos semanas en Francia.
A su regreso, el marido otra vez pidió a sus amigos que lo acompañasen al aeropuerto a recibirla.
Al verla llegar, lo primero que le gritó a toda voz fue:
- ¿Amor me trajiste mi francesita?
- Hice todo lo posible, - contestó ella - ahora sólo tenemos que rezar para que nazca niña.

Tags: franceses, aeropuertos, amor

Comparte o comenta este chiste en Facebook, Twitter o Google+

Chiste de cortos, buenos

En un manicomio, una de las enfermeras ve a un paciente escribiendo.
- Hola Pepe, que haces ?
- Estoy escribiendo una carta.
- Y a quien se la vas a mandar ?
- A mi mismo.
La enfermera siguiendo el juego comenta:
- Aja, ya veo... y dime, qué te cuentas ?
Ante esta pregunta responde el loco extrañado:
- ¿cómo quiere que lo sepa? Si todavía no la he recibido!

Tags: locos, manicomios, enfermeras

Comparte o comenta este chiste en Facebook, Twitter o Google+