XUso de cookies:Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar la experiencia de navegación y ofrecer contenidos y publicidad de interés. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Puede obtener más información, o bien conocer cómo cambiar la configuración, en nuestra Política de cookies

Buscador de chistes

Chistes de sujeto

Otros chistes

Chiste de largos, buenos, verdes, matrimonios

Un hombre conoció una linda mujer y decidió casarse con ella inmediatamente.
Ella le dice:
- Pero no sabemos nada uno del otro...
El respondió:
- No hay problema, nos conoceremos con el tiempo.
Ella aceptó.

Se casaron y fueron a pasar la luna de miel en un lujoso apartamento. Cierta mañana, estaban ambos recostados junto a la piscina, cuando él se levantó, subió al trampolín de 10 metros realizó una perfecta demostración de todos los saltos que existen y regresó junto a la esposa.
Ella le dice:
- ¡Eso fue increíble!
- Fui campeón olímpico de saltos ornamentales. Te dije que nos conoceríamos con el tiempo- respondió él.
En eso, ella se levanta, entra en la piscina y comienza a nadar, ida y vuelta con impresionante velocidad. Después de 30 vueltas, sale y se va a recostar junto al marido, sin demostrar ningún cansancio.
El dice:
- Estoy sorprendido!, ¿fuiste nadadora olímpica?
- No, -explicó la dama- fui puta en Venecia y atendía a domicilio.

Tags: nadar

Comparte o comenta este chiste en Facebook, Twitter o Google+

Chiste de buenos, largos

En una ocasión se encontraron tres locos en un desierto. Llevaban varios días de recorrido y no habían encontrado nada para comer y mucho menos para beber. Después de cinco días, los tres locos encontraron un coche viejo en medio del desierto, uno de los locos pregunta:
- ¿Para qué nos puede servir este coche?
El segundo le contesta:
- Yo no sé, pero tiene que servir para algo.
A lo que el tercero le responde:
- Yo me voy a llevar un asiento para sentarme cuando me canse.
Le dice el segundo:
- Yo me voy a llevar el radiador para tomar agua cuando tenga sed.
El primer loco dice:
- Pues, yo me voy a llevar una puerta.
Y los otros locos le dicen:
- ¿Una puerta? ¿Y para qué?
A lo que el primer loco le contesta:
- ¡Para bajar los cristales cuando tenga calor!

Tags: locos, desiertos, coches

Comparte o comenta este chiste en Facebook, Twitter o Google+